Conclusiones del proyecto 'Gestión democrática de la diversidad en Navarra: Convivencia'

Proyectos

17/12/2021

Conclusiones del proyecto 'Gestión democrática de la diversidad en Navarra: Convivencia'

El proyecto firmado con el Gobierno de Navarra ha realizado un análisis social entre la ciudadanía y agentes del territorio para conocer y reforzar las condiciones que impulsan la convivencia. El proceso y las conclusiones del análisis están recogidas en el informe de 2021.

El proyecto denominado Gestión democrática de la diversidad en Navarra: convivencia  se sitúa en el marco de colaboración entre el Gobierno de Navarra y Eusko Ikaskuntza. En concreto, es la continuación del proyecto que comenzó en 2019 y continuó a lo largo de 2020. Cuando iniciamos el proyecto, nuestra intención era responder a una serie de preguntas de fuerte calado social: cómo buscar consensos amplios para que la sociedad navarra avance como territorio y cuál podría ser el marco más adecuado para que ciudadanos y ciudadanas de diferentes identificaciones ideológicas, políticas y culturales puedan establecer relaciones de colaboración, basadas siempre en un ambiente no il y de confianza democrática.

En 2020 situamos nuestra principal reflexión en el tema de la convivencia, tratando de responder a una pregunta: ¿por qué hay que hablar de convivencia en una sociedad democrática? Esta era la pregunta fundamental que aparecía en el informe que se presentó para dar a conocer el proyecto desarrollado a lo largo de 2020, Gestión de la diversidad en Navarra: convivencia. Y el proyecto trabajado en 2021 debe entenderse como una continuación de aquél, fruto del convenio entre Euskarabidea -Gobierno de Navarra- y Eusko Ikaskuntza. Seguimos intentando desenredar la madeja plagada de nudos -unas veces visibles, otras no tanto- de la sociedad navarra, a través del análisis sociológico.

Debemos recordar, que, al igual que en 2020, este proyecto de Eusko Ikaskuntza se desarrola en relación con el I Plan Estratégico de Convivencia impulsado por la Dirección de Convivencia, Paz y Derechos Humanos del Gobierno de Navarra.

Nuestro punto de partida en 2021 ha sido el siguiente: hoy en día, en la Comunidad Foral de Navarra, existe un problema de convivencia que impide un juego democrático legítimo. Muchos ciudadanos y ciudadanas expresan su disgusto por la crispación o agitación existentes, sobre todo a nivel político. Por ello, este ha sido el objetivo que hemos asignado al proyecto de este año: indagar en las condiciones básicas para crear el clima de confianza necesario que nos lleve a la construcción de la convivencia. Hemos dado, pues, un paso más: si la base del ambiente polarizado es la falta de interés por la convivencia, ¿qué condiciones necesita la convivencia para avanzar? ¿Y qué papel le correspondería a cada agente social y político? Hemos intentado encontrar orientaciones o sugerencias concretas para cada uno de ellos.

¿Cómo construir un marco mínimo, y satisfactorio para todas las ideologías, en que el euskera y el castellano, por un lado, pero sobre todo las diferentes identidades nacionales, puedan desarrollarse en un ambiente cómodo, libre de amenazas y abierto al debate? Para que, en lugar de vivir uno al lado del otro, podamos vivir juntos, sin renunciar a los propios principios ni a la identidad. En otras palabras, ¿cómo se puede lograr un mínimo de confianza y solidaridad entre todos los navarros y navarras? No es un reto cualquiera encontrar respuestas a esta cuestión, pero lo hemos intentado.

Los obstáculos con que se encuentra la convivencia quedaron ya de alguna manera identificados en el proyecto anterior: la gestión del euskera y los desencuentros originados por identidades nacionales polarizadas. En este proyecto, una vez detectados los obstáculos, se pretende profundizar en las claves para su solución, teniendo en cuenta que el diseño de la política lingüística no debía ser uno de nuestros principales objetivos.

Por ello, en este proyecto hemos incorporado y concedido importancia al concepto de confianza. ¿En qué consiste la confianza social? Teniendo en cuenta que la confianza se puede analizar desde muchos puntos de vista, nuestra pregunta ha sido: ¿Cómo se pueden alcanzar consensos amplios? Qué tipo de sugerencias se pueden hacer a los diferentes agentes navarros? Para ello, nos hemos servido de un Consejo Asesor compuesto por personas de todo el territorio navarro, con un objetivo claro, dicho de nuevo: poder comunicar sugerencias o recomendaciones a los diferentes agentes citados, con el objetivo de fortalecer un clima de confianza.

Por otra parte, dado que el tema a analizar en profundidad era la confianza como condición para la convivencia, hemos querido estudiar asimismo las reflexiones teóricas que se hacen al respecto. Y, además, nos ha parecido interesante también mirar hacia el exterior, para ver qué tipo de soluciones se han planteado en otros contextos, fuera de la sociedad navarra, cuando la convivencia se ha visto afectada por diferentes conflictos. Con todo ello, hemos querido responder a una gran pregunta: ¿cómo posibilitar un clima de confianza entre quienes piensan diferente? Con este objetivo, el 16 de junio celebramos en Pamplona la jornada “Nuestros desacuerdos: trabajar la confianza entre diferentes.” Se propusieron, para ello, dos Mesa de debate: una Mesa internacional, para conocer las reflexiones y experiencias habidas fuera de Navarra; y la Mesa de Navarra, formada por expertos locales, para tratar sobre la problemática específica de nuestro territorio.

Por último, hablando de identidad nacional, necesariamente hemos tenido que hacer alusión al impulso político que sin lugar a dudas existe detrás de ella. Metodológicamente, pensamos que lo mejor era acudir directamente a los agentes políticos. De esta forma, hemos entrevistado a trece personas (hombres y mujeres) de todo el territorio, tratando de abarcar todas las opciones ideológicas de Navarra; algunos representantes directos y otros, simpatizantes sin ninguna relación orgánica.

El informe que se publica es el resultado del trabajo realizado en el año 2021. El proyecto pretende seguir adelante en el año 2022, queremos ir al problema de fondo: ¿qué pasos deberían dar los agentes sociales y políticos para que haya un mínimo clima de confianza entre la ciudadanía navarra con identidades nacionales diferentes, de manera que se puedan debatir democráticamente los problemas  y las administraciones puedan hacer, a su vez, una gestión democrática de ellos? Para ello organizaremos grupos de debate con jóvenes de todo el territorio para contrastar el trabajo realizado hasta ahora e identificar oportunidades en los discursos de las nuevas generaciones.

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