Desde 2019, Eusko Ikaskuntza y el Gobierno Foral impulsan un programa de diálogo y reflexión para mejorar la convivencia entre la ciudadanía navarra.
Con carácter participativo, deliberativo y abierto a ciudadanía, agentes sociales y personas expertas, el programa se articula en torno a dos ejes: la convivencia en la diversidad y su gestión democrática mediante la búsqueda de unas premisas mínimas consensuadas.
Durante la fase inicial del proyecto se observó que un motivo señalado de división y conflicto en el seno de la sociedad navarra proviene de su pluralidad lingüística. Por ello, se determinó centrar la segunda fase del estudio en el euskera y la polarización en torno a las identidades nacionales que con frecuencia se manifiesta junto a él.
A lo largo del año 2020 se ha trabajado en tres grandes espacios de participación: Grupo Experto (cinco encuentros), Mesa de Agentes Sociales (dos encuentros) y Mesa Ciudadana. Con los resultados obtenidos, el Grupo Motor ha elaborado un informe en el que se recoge la descripción del proceso seguido y las conclusiones a las que se ha llegado. A destacar, entre ellas, la enorme polarización a la hora de abordar soluciones al tratamiento del euskara por parte de la Administración y la actitud más abierta de las nuevas generaciones ante el problema identitario, la lengua y la diversidad cultural.
El informe, presentado este mes de febrero ante el Gobierno de Navarra, perfila los objetivos y la metodología que seguirá el programa en 2021.
El proyecto Gestión democrática de la diversidad en Navarra se incluirá dentro del I Plan Estratégico de Convivencia del Gobierno de Navarra impulsado por la Dirección de Convivencia, Paz y Derechos Humanos, que apunta a la generación de múltiples espacios de estudio, análisis y debate sobre el estado de la convivencia en Navarra.
