Eusko Ikaskuntza inicia el año renovando el catálogo y recibiendo más apoyos de los ayuntamientos.
La colaboración con los ayuntamientos es clave para Eusko Ikaskuntza. Por eso empezó en los años 90 a firmar convenios con diferentes municipios. Claro que los tiempos y la propia organización han ido cambiando. El programa municipal también inició en 2017 la evolución para dar respuesta al nuevo modelo de Eusko Ikaskuntza y a las necesidades de la sociedad actual. Fruto de esta adaptación continua es el catálogo presentado para 2020.
Se quiere poner el foco en dos líneas de trabajo principales a la hora de trabajar con los ayuntamientos:
- El Libro Blanco y la agenda sobre los retos del futuro
El Libro Blanco presentado el 23 de noviembre de 2018 en Oñati recoge los escenarios deseables para configurar como pueblo el futuro deseado y las propuestas de agendas para su respuesta. Los municipios tienen mucho que decir en el camino hacia la construcción del futuro conjunto. Eusko Ikaskuntza propone a los ayuntamientos abordar estos retos mediante metodologías participativas, con formatos acordes con la naturaleza y objetivos del proyecto.
- Planes de análisis e interpretación de la historia y el patrimonio
Eusko Ikaskuntza trabaja con personas expertas locales para asegurar la investigación en profundidad del patrimonio, el diagnóstico de los recursos y la garantía científica de los contenidos generados. Y todo con un diseño adecuado y atractivo, reflejado en soportes y materiales de alto nivel.
Desde que en 2017 se pusieran en marcha dichos cambios dentro del programa de ayuntamientos, más de 70 consistorios de Euskal Herria han ratificado su apoyo al proyecto de Eusko Ikaskuntza. Se puede decir con satisfacción que este año cuenta con dos nuevas entidades socias, los ayuntamientos de Getxo y Carranza, y que se ha vuelto a firmar un convenio con el ayuntamiento de Laguardia. Los tres se encuentran, además, entre los ayuntamientos patrocinadores de Eusko Ikaskuntza en 1918.