Escaladora "Llegará un momento en el que no seré capaz de practicar la escalada a los niveles en los que la practico ahora, pero no renunciaré a los placeres que me brinda esta actividad. No podría vivir sin ellos" Teresa Sala
Jatorrizko bertsioa euskaraz Es la mejor escaladora del mundo. Ha superado marcas que muy pocos hombres han conseguido. El francés Tribout dijo un una vez que en escalada “el octavo grado está reservado al hombre”. Josune Bereziartu ha demostrado que esto no es cierto, ni el octavo grado ni el noveno. La joven lazkaotarra ha conseguido, entre otras cosas, la cadena del primer 9 a mundial con la vía suiza “Bain de Sang”. Entre sus proyectos de futuro se encuentra probar una vía de grado 9 a+ en Japón. Sólo existen tres hombres en el mundo que han conseguido superar este grado de dificultad. Para ella la escalada no es sólo una práctica deportiva, sino un modo de vida, una forma de aceptar la realidad y plantarle cara. Habla de su habilidad con modestia, es sincera y ella misma se define como una “joven normal a la que le gusta pasear y disfrutar de familiares y amigos”. Entre tanto, sigue escribiendo páginas en la historia mundial de la escalada deportiva. Tuviste la primera noticia de lo que era la escalada deportiva cuando tenías 17 años. ¿Cómo fue la toma de contacto con este deporte? He practicado deporte desde que era una niña y siempre me ha gustado. Recuerdo que comencé a interesarme por la escalada a raíz de un programa de “Al filo de lo imposible” en el que aparecía una cordada femenina, yo tendría alrededor de diecisiete años y fue mi primera toma de contacto con este deporte. Al poco tiempo mi cuñado Tomás Apaolaza me llevó a la escuela de escalada de iniciación de Egino, en Araba. La primera vía que escalé ya me caló hondo y tomé la decisión de que este sería mi deporte. Conocí y me integré en un grupo de montañeros de Beasain que practicaba regularmente la escalada. Y es que en aquellos tiempos no era habitual visitar las escuelas de escalada con asiduidad; se trataba de escalar los fines de semana. No se podía llevar el monte al resto de la semana. Jesús Leunda se erigió en la figura más importante y trascendental en mis comienzos, ya que gracias a él conocí y aprendí a respetar los valores hondos del espíritu de la escalada deportiva y, por supuesto, la difícil técnica de pies de este deporte. En aquellos años, ¿qué vías o escuelas frecuentaste? En mis primeros años la escuela navarra de Etxauri era la zona más importante, junto con las placas calcáreas y verticales de la escuela alavesa de Egino. Parecía imposible escalar paredes con una inclinación mayor a 90 grados y, por supuesto, los techos y las cuevas sólo eran para los murciélagos. Pero escaladores pioneros y fuertes como Manu Beriain tuvieron la afortunada visión futurista sobre paredes muy inclinadas en las que una preparación física de gimnasio era igual de importante que una buena técnica. Además, yo siempre voy a tener una unión muy emotiva a las vías y al lugar de Araotz, en Oñati, ya que es en esta escuela donde prácticamente me he hecho como escaladora, empezando con mi primer 8 a HIENA abierto por uno de los pioneros escaladores de Euskadi, Rikar Otegi. Ya casi no me acuerdo... pero esto sería allá por el año 1994. Al año siguiente comenzaría a hacer historia, o al menos a escribir mi historia con el primer 8 a+ del estado español. ¿Llegaste a pensar entonces en que la escalada se iba a convertir en tu forma de vida? La verdad es que no. Nunca he sido una de esas personas que piensa en el futuro o que planifica. Es algo que ha ido ocurriendo poco a poco, paso a paso. Y en cada paso me he encontrado con cruces de caminos que me han obligado a tomar decisiones. El día a día me ha traído hasta donde estoy ahora. Y, ¿cómo acogieron familiares y amigos tu nueva afición? Al principio la gente se extrañaba. Y es que siendo una adolescente yo prefería irme el fin de semana a escalar que salir de fiesta, y eso no se llevaba. Además, tal y como yo la concebí y la sigo concibiendo, la escalada era algo más que una práctica deportiva. Se trataba de una filosofía que llevaba implícitos una alimentación sana, un cuidado por el medioambiente, cierta inquietud cultural. Era una corriente deportiva que acarreaba muchas cosas, no se trataba de un deporte propiamente dicho como lo es ahora. Al principio a mis amigos les extrañó pero en mi familia, por ejemplo, nunca llegaron a temer por los peligros que podía correr por salir a escalar. En aquellos años la gente temía mucho, la mayoría de las veces por desconocimiento. La preparación psicológica es otro de los ingredientes del entrenamiento del escalador. Al escalar se puede sentir miedo, por supuesto. Pero no se trata de un miedo a una posible caída o a hacerte daño. Es un miedo escénico. El enfrentarte a retos o situaciones que tú mismo te has planteado sin que nadie te obligue. Por supuesto que hace falta una preparación psicológica que te ayude a creer en ti mismo y a tener la fuerza suficiente. A aceptar ese momento y, aunque te cueste y no lo disfrutes, a saborear la sensación de haber sido capaz de pasar por ahí. Creo que la preparación psicológica es muy importante en todos los deportes. ¿Cuál es el logro que más satisfacciones te ha dado? Es muy difícil concretarlo todo en una única vía o en una sola expedición. La mayor satisfacción es sentir que al cabo de doce o trece años escalando esto me sigue ilusionando como al principio. Además, saber que la historia de la escalada femenina pasa por Josune Bereziartu también ha sido muy importante, por supuesto. También me han brindado grandes satisfacciones ciertas dedicatorias que tengo de escaladores masculinos de gran prestigio que dicen, por ejemplo, que yo les inspiro para seguir escalando, o que incluso confiesan tenerme como referente. Todo esto es increíble. Si tuviera que concretar todo esto en una vía y en un nombre diría que ha sido el 9 a de Bain de Sang. ¿Cómo es el día a día de Josune Bereziartu? Las actividades o cosas que haga dependen del momento del ciclo de entrenamiento en el que me encuentre. Sobre todo al principio del ciclo, durante todo el día y muchos días seguidos, escalo o entreno. Porque en esta época es muy importante hacer mucho volumen de horas de entrenamiento y entrenar muy duro. Cuando el objetivo al que me quiero enfrentar se va acercando esta intensidad baja y aumenta la calidad del entrenamiento. Además de practicar la escalada Rikardo y yo trabajamos como agentes de seguros. ?Bain de Sang? 9 a, Saint Loup. Suiza. Y, ¿cómo compaginas las dos actividades? El día tiene 24 horas y al final hay tiempo para hacer de todo siempre que haya ganas e ilusión para ello. Además, considero necesario el tiempo de ocio, relax o recuperación. A mí me gusta mucho estar con mi familia y con mis sobrinos. La verdad es que no hago cosas extraordinarias. Me encanta pasear y disfrutar de lugares cercanos, de Donostia, Peñas de Haya, Aitzgorri o Txindoki, por citar algunos. ¿Has vivido alguna situación cómica o grotesca por ser mujer en un territorio principalmente masculino? Nosotros solemos equipar vías de escalada, para lo que se necesitan brocas y taladros, entre otras cosas. La verdad es que las situaciones más cómicas las he pasado en ferreterías o tiendas especializadas al ir a comprar herramientas típicas de peones o de jefes de obra. Pero esto es algo que va implícito a nuestra sociedad actual y que afortunadamente está cambiando. ¿Qué es lo más satisfactorio y lo más frustrante de la escalada? Lo más satisfactorio, sin duda, es la sensación de haber conseguido algo, de haber superado una comodidad momentánea por una satisfacción mayor. Esto es muy satisfactorio y muy bonito. El haber luchado duro por algo y haberlo conseguido. Por otro lado, dentro de la práctica de la escalada deportiva hay muchos días muy malos en los que te puedes llegar a sentir increíblemente frustrado. Días en los que te levantas con unas intenciones y en los que no consigues lo que quieres. Aún y todo, esa misma cabezonería o inconformidad te empujan a seguir adelante. La línea entre el éxito y el fracaso es muy frágil en una vía de escalada, y esto puede llegar a ser muy frustrante. Afortunadamente es algo que se supera. ¿Qué proyectos tienes entre manos? Tenemos intención de ir a la zona suiza de Gruyere a probar una pared virgen de 300 metros. Se trata de la vía YEAH MAN, que no ha escalado nadie todavía, tiene un total de nueve largos y el octavo largo puede llegar a ser un 8b+ o un 8c. También queremos ir a Japón, donde quiero probar una vía de 9 a+. Hoy en día solo existen tres hombres en el mundo que han conseguido superar este grado de dificultad. Tsunami 8c c+. ¿Hasta que punto te anima el hecho de ser la única mujer en el mundo que ha llegado a un nivel tan alto? ¿Este hecho puede llegar a crearte presión? La satisfacción de crear una referencia y de ir haciendo la historia de la escalada mundial también me crea una cierta responsabilidad u obligación. Me digo a mí misma que tengo que aprovechar este don, que no hay que vivir de rentas y que tengo que hacer todo lo que esté en mi mano por este deporte. Pero también comprendo que no me tengo que obsesionar, porque las obsesiones y los fanatismos no llevan a ningún lado. ¿Puedes imaginarte una vida sin escalar? No. Hace dos días, precisamente, llevé a mi madre al rocódromo del Pío Baroja en Donostia y con más de cincuenta años a sus espaldas fue capaz de escalar una vía. Además, no se trata de vivir una vida sin escalar, sino renunciar a todo un modo de vida. Llegará un momento en el que no seré capaz de practicar la escalada a los niveles en los que la practico ahora pero no renunciaré a los placeres que me brinda este deporte. A disfrutar, por ejemplo, del silencio de la naturaleza colgada de una pared, de una puesta de sol, de momentos inolvidables... Todo esto es imprescindible para mí. Josune Bereziartu (Lazkao)
Vías y grados de dificultad logrados por la joven escaladora de Lazkao, que además de superar récords internacionales ha logrado, en un década, vencer cualquier expectativa personal y foránea.
- 1992: “Belle Epoque” 7c. Araotz, Oñati. Su primera vía de este grado. Marca el arranque de su progresión.
- 1993: “Hiena” 8 a. Araotz, Oñati. Se estrena en el octavo grado en su escuela natural.
- 1995: “Acción mutante” 8 a+. Araotz, Oñati. Sin abandonar Araotz pero trasladándose de sector, se hace con esta magnífica, desplomada y continua vía de Gorka Garitonandia.
- 1996: “Fetuccini” 8b+. El convento. Primera femenina del estado de este grado. La escenificación de este encadenamiento en uno de los epicentros del grado de Araba se asienta su primera vía de este grado. Elige para su performance una vía de Iñaki Marko.
- 1997: “Ultime Atome” 8b+, Verdon, Francia. “No Name” 8b+, Mallorca. “El Sikario” 8b+, Escalete, Huesca. “Fli&Tox” 8 a, Aiguines, Francia.
- 1998: “Honki Tonky” 8c, Araotz, Oñati. Primer 8c femenino a nivel mundial.
- 1999: “White Zombie” 8c, Baltzola, Dima. “Ras” 8c, Baltzola, Dima.
- 2000: “Honki Mix” 8c+, Araotz, Oñati. Primera mundial femenina en este grado. “Bon viatge” 8 a+, Les Bruixes, Terradets (Lleida). “El Gran Engaño” 8 a+, Campezo. Su primer 8 a+ a vista. “Berezi” 8 a. Grado Fb. Boulder 2ª femenina mundial.
- 2001: “Welcome to Tijuana” 8c, Rodellar, Huesca. “La Última Aldea” 8c, El Convento. “Azken Baso Oilarra” 8c/c+, El Convento. “Last soul sacrifice” 8c, Gorges du Loup, Francia. “Total Class” 8c, Gorges du Loup, Francia. “Deverse Satanique” 8 a+, Gorges du Loup, Francia (a vista). “Naska” 8 a+/b, Apellaniz (a vista). “La Cocinnelle” 8 a, Fontainbleu, Francia. “Atomic Play Boy” 8 a+, Fontainbleu, Francia.
- 2002: “Pilar del Cantábrico”. Picos de Europa, hasta 8 a+. Primera mujer en libre. “Specialistes Direct” 8c, Verdon, Francia. “Macumba Club” 8c, Orgon, Francia. “Ocho años de sexo” 8b+/c, Subijana. “Bain de Sang” 9 a, Saint Loup. Suiza. Primera mundial. Travesía de Baltzola en bloque 8b+/c. Menu ELKARRIZKETA Inicio > EM 253 > Elkarrizketa -->
2004/05/07-14