Cristina Garmendia. Biologa. Presidenta del grupo Genetrix y Tambor de Oro 2008: El mayor regalo que me hizo mi padre fue la cultura del esfuerzo
2008-01-18
SALABERRIA, Urkiri
¿Cómo son sus recuerdos de niñez?
(Se sonríe) Te cuento. Estuve viviendo en San Sebastián hasta los 18 años, y el recuerdo que tengo de mi época de colegio es que me lo pasaba muy bien, tanto con mis compañeros como con los profesores. Iba al colegio francés y me alegro un montón, porque como hoy en día el inglés es obligatorio (quiera y no tienes que aprenderlo), ahí aprendí a hablar francés y me ha venido muy bien. Te diría que cuando pienso en mi infancia me vienen sensaciones de mucho cariño y de que fue una época muy feliz. Quizás tiendo a idealizar las cosas...
Ha comentado que recuerda a sus compañeros de colegio y en casa ¿eran muchos hermanos?
No. Tengo una hermana que además es mucho mayor que yo, ella se casó cuando yo tenía 6 años y no tuvimos una larga convivencia. Con quienes sí que he convivido es con mis sobrinos, María y Elías, porque somos más parecidos de edad.
¿Qué diferencias encuentra entre la Donostia del pasado y la actual?
Te diría que yo recuerdo Donostia como la ciudad que es ahora, una ciudad que a pesar de ser tan pequeña está llena de facilidades y comodidades y es muy, muy fácil vivir allí. Yo recuerdo que de pequeña tenía una gran independencia, el modo en que estaba y está todo organizado me facilitaba el poder ir yo sola a todos los sitios y me daba tiempo de llegar a todo... Porque yo era de esas que se apuntaban a todas las extraescolares, gimnasia, natación, montaba a caballo, me apuntaba para ir a esquiar... Era muy deportista
¿Cómo veían en casa tanta actividad?
Mis padres eran unos incondicionales y siempre me apoyaron en todo. Pero sobre todo me animaban a que fuera autónoma e independiente... algo que yo también practico con mis hijos.
Ahora que lo comenta, ¿cuántos hijos tiene?
Tengo un hijo y una hija. Ander de 12 años y Teresa de 11.
Y ¿cómo ha sobrevivido a lo que hoy llaman “conciliación familiar”?
Pues muy bien. Lo cierto es que nunca he tenido ningún problema. A mis hijos les veo bien, (aunque sería mejor preguntárselo a ellos) son felices, van bien en el colegio... Que cómo hago lo de la conciliación familiar, pues supongo que como todas las mujeres y, espero que, todos los hombres: Planificación y organización. De hecho, el mayor lujo que me permito en todo el año es pasarme allá por el mes de Julio, cuando los niños están en los campamentos de verano, tres o cuatro días sola, completamente sola. Me voy al Pirineo para desorganizarme, para vivir sin planificarme, y sin nada.... A lo que surja, a lo que me parezca. Es la mejor terapia del año.
Retomando el hilo biográfico, cuando escogió la carrera, Biología, ¿Por qué se fue a Sevilla?
(Riéndose) ¡Eso mismo me preguntaba mi madre! En principio dudaba si estudiar Biología o Física. Pero sobre todo, dos factores me empujaron a escoger Biología y en Sevilla. Por una parte yo tenía claro que lo que me gustaba era la investigación en cualquiera de las dos facetas (física o biología) y por otra parte, con 18 años, yo quería conocer otras cosas y quería salir de Donostia. Así que cuando vi que en Sevilla, había una especialidad en Genética, Biología molecular, que estaba abierta tan sólo para doce alumnos escogidos por expediente, me propuse formar parte de este grupo tan especial. Y allí me fui.
Pero hay que tener mucha confianza en uno mismo...
Por supuesto, y también hay que trabajar y estudiar. El mayor regalo que me hizo mi padre fue la cultura del esfuerzo y eso es algo que trabajo con mis hijos: estudiar, estudiar y estudiar, ese es el camino para poder elegir y ser libre. Esa es la premisa, no se estudia para sacar buena nota, sino para uno mismo. La posibilidad de poder elegir es lo que te va dar mayor satisfacción y felicidad. Además, no solo mis padres me inculcaron esa cultura, mi tía, que ahora tiene unos 90 años, también fue mujer empresaria en su época. He tenido la gran suerte de que además de esta cultura del esfuerzo he vivido éxitos profesionales y personales. Me esfuerzo mucho, pero estoy eligiendo el camino que quiero seguir. El poder elegir es un lujo.
¿Tenía su padre algo que ver con la investigación?
No. Tenía que ver con el mundo de la pesca, era armador, pero cuando se casó, con unos veinticinco años era de todo lo que se podía ser, llevaba la contabilidad de dos empresas... lo que fuera, con tal de poder abrirse su camino. Provenía de un origen muy humilde y a base de un gran esfuerzo consiguieron salir adelante (y muy bien por cierto).
Yo nací en una circunstancia muy distinta, partía de un nivel medio alto, pero él me transmitió de una manera muy clara: lo mejor que te puede pasar es poder elegir, pero además tienes que ser independiente de todo, no puedes tener dependencia ni de tus padres, ni de tu marido, ni de nada.
Me quedo en silencio: Tras esto, creo que cualquier pregunta que tuviera preparada no puede conseguir una respuesta más emotiva, sincera e interesante. Por eso únicamente añadiré la pregunta que no podía faltar en esta entrevista.
Cuando reciba de manos del alcalde de Donostia “el Tambor de Oro”, ¿en qué o quién cree que pensará?
Por supuesto que en mi padre. Murió hace tres años. Fotografía: Juan Mari Zurutuza
Pero la conversación continuó y seguimos hablando con Cristina Garmendia. A continuación una selección de otras cosas que nos contó.
INDEPENDENCIA: En las relaciones de pareja cuando ya llevas 10 o 15 años con tu marido (y ya tienes tus hijos...), poder decirle a los ojos, estoy contigo porque te quiero y no porque “tengo que”, es maravilloso. Por eso es tan importante ser absolutamente independiente, luchar por la independencia es una clave de felicidad sin ninguna duda.
LUJO: Cuando mis hijos eran aún muy pequeños, yo todavía no había lanzado el proyecto de Genetrix. Tenía un trabajo que podía compatibilizar más fácilmente con el cuidado intensivo de los bebés. Además, he tenido y tengo la suerte de poder contar con ayuda en casa y tener una madre que, a pesar de estar a punto de cumplir 86 años, en cuanto le llamo porque me tengo que ir de viaje (y coincide con que mi marido también esté fuera), se coge el billete electrónico y viene desde San Sebastián para cuidar a los niños. ¡Eso es un lujo!
MODELO DE REFERENCIA: Intento que parte de los viajes que tengo que hacer por razones de trabajo se conviertan en oportunidades para que mis hijos viajen y conozcan diferentes sitios. A los niños hay que hacerles partícipes de la vida profesional de los padres en la medida en que ellos puedan entenderlo. No es posible segmentar la parcela profesional de la personal, los hijos tienen que conocer y comprender la parte profesional de sus padres, en parte porque va a ser un modelo de referencia para ellos, y ello les va a dar la ocasión de poder elegir sabiendo lo que es cada cosa.
BUENAS NOTAS Y ALGO MÁS: Cuando miro los curriculos de las personas que quieren trabajar con nosotros, una de las cosas en las que más me fijo es en qué hace la gente en su tiempo libre. Es decir, has hecho la carrera en cinco años y con unas notas increíbles, pero ¿qué has hecho durante los veranos? ¿Cuál es tu planteamiento vital? Una clave de éxito para luego poder encajar en la organización es la entrevista personal.
PROYECTOS: Para poner en marcha un proyecto tiene que existir una oportunidad clara de innovación, un parámetro razonable para salir adelante y fundamental: ¿quiénes están por detrás? Muchas veces, detrás de una idea muy buena hay una persona complicada, y con lo difícil que es impulsar la investigación, innovación y desarrollo, no podemos añadir “extras” de la complejidad de las personas. No existe “la oportunidad”, siempre existen varias.
ÉXITO: El éxito de una idea se basa en un conjunto de parámetros, no sólo en la invención. El equipo, la motivación, la actitud de las personas son tan importantes como la idea en sí misma.
GENETRIX: Surge en la sobremesa de una comida con Carlos Martínez Alonso (actual presidente del CSIC), Antonio Bernat (Profesor Investigador de Células Madre) y yo, (lo cierto es que mantenemos una relación de amistad muy fuerte desde la época del doctorado). Eran los años 98-99, y comentamos cómo se había firmado un acuerdo entre el grupo de Investigadores de Carlos (unos 150) y la industria farmacéutica. Nos dimos cuenta de que existe un hueco muy grande entre la investigación y la industria. Así que de un modo sencillo se puede decir que Genetrix se ocupa de trasladar las invenciones a la industria farmacéutica.
Pero... (sonriéndose) tras esa idea tan romántica había una carrera de obstáculos, por supuesto, pero somos un equipo “apasionado” y obstáculo tras obstáculo fuimos avanzando.
MUJER PROFESIONAL: Existe el bloqueo mental en la sociedad que impide imaginar a una mujer embarazada y buena profesional. Pero este bloqueo se resuelve con la experiencia. En Genetrix hemos tenido muchísimos embarazos y los hemos gestionado de maravilla, no se trata de una “complicación” sino de una realidad. En Genetrix somos mayoría de mujeres, porque en la selección de profesionales ha surgido así.
LEY DE IGUALDAD: Estoy de acuerdo con todas aquellas actuaciones que incentiven pero no obliguen. Estoy absolutamente de acuerdo con todas la políticas que faciliten la presencia de las mujeres en todos los ámbitos y desde arriba hasta abajo, pero estoy de acuerdo siempre y cuando se incentive y no se obligue. Por ejemplo, los consejos de administración están compuestos por consejeros que son representantes del capital de la compañía, el capital no tiene sexo, el capital es de quien es, sea hombre o mujer, por eso me parece que no debieran de exitir esas cuotas de “igualdad”. Yo conozco muchas mujeres que están en altos cargos directivos y te aseguro que no han llegado por ninguna cuota.
PROGRESO PROFESIONAL: A la hora se ofrecer un ascenso me fijo en si tiene una buena o u una mala conciliación familiar, no en si es hombre o mujer. Cuando existe una mala conciliación familiar, esa persona tiene un grave problema, no por ser mujer u hombre, sino porque tiene un problema familiar de equilibrio, esa persona no está preparada para asumir más responsabilidades. Hace quince años era raro, socialmente, ver mujeres que tuvieran el equilibrio en la pareja que hiciera posible que ellas progresaran, hoy en día ya no. Eso ha cambiado y las parejas ven con más normalidad que sean ellas las que evolucionen en su carrera profesional.
I+D+i: Es muy importante que un país tenga muy clara su apuesta por la investigación, desarrollo e innovación, tres cosas secuenciales y muy importantes.
EUSKERA: Un tesoro a preservar, parte de nuestra esencia, parte de nuestra cultura, de nuestro origen... es todo. Dicho esto, tenemos que hacer que sea atractivo para el mundo pero no podemos convertir nuestro idioma en una barrera. El talento, esté donde esté, tiene que poder venir a Euskadi. Es fantástico que todos los niños hablen euskera, pero lo que es imprescindible es que hablen inglés. ¡En Suiza los niños hablan cinco idiomas!
CREO EN: La realidad del día a día y en el esfuerzo permanente de crecer como personas.
UN DESEO PARA SUS HIJOS: Que sean libres y que tengan el privilegio de escoger su opción vital. LA SOCIEDAD DEL S.XXI: Plural y libre, donde se pudieran defender, que no imponer, diferentes visiones, donde podamos cuestionar nuestras verdades, porque las verdades absolutas no existen, a través de la duda: No lo tengo claro, no sé si es así, estoy dudando de lo que decía. Hay políticas y religiones que no admiten la duda, y la duda es la esencia del progreso. Cristina Garmendia (Donostia, 1962) Es licenciada en Biología (Universidad de Sevilla) y doctora en Biología Molecular (Universidad Autónoma de Madrid), además de MBA (IESE; Barcelona). Presidenta y una de las fundadoras de Genetrix, posee más de 10 años de experiencia en alta dirección. Es presidenta de Asebio (Asociación Española de Bioempresas) y miembro de la Junta Directiva de la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales).
